Una
vez alguien muy sabio dijo:
- Cuando las puertas se cierran,
en algún
momento dado,
se abre una ventana.
Y a pesar de que esta frase
no se la cree practicamente nadie,
en realidad es cierta.
Tal
vez por un golpe de aire,
magia o llámale empujón,
la ventana
más olvidada del mundo
se abre ante tus narices
y aparece la luz que tanto
necesitabas ver.